PELÍCULA BIOGRÁFICA

SALVADOR

Director: Manuel Huerga

Intérpretes: Daniel Brühl, Tristán Ulloa, Leonardo Sbaraglia, Celso Bugallo, Leonor Watling.

Salvador Puig Antich fue un anarquista catalán, miembro del Movimiento Ibérico de Liberación (MIL), que fue ejecutado por el régimen franquista el 2 de marzo de 1974, a las 9.40 de la mañana en la cárcel Modelo de Barcelona. Fue la última persona en España ejecutada mediante el garrote vil, un método que fue abolido durante la Segunda República y reestablecido por el franquismo, que producía una muerte lenta por asfixia.

En 2001, el periodista catalán Francesc Escribano escribió el libro Cuenta atrás. La historia de Salvador Puig Antich, en el que está basada la película.

Una película dura por los hechos que se cuentan, y que a pesar de conocer el final, y quizá aún más por ello conmueve enormemente al espectador. El film comienza con la policía atrapando a Salvador, interpretado por un Daniel Brühl impresionante.

No es la primera vez que Brühl se mete en la piel de un joven anarquista, anteriormente ya lo hizo en Los edukadores, y admite compartir "muchos de los ideales de los dos jóvenes en ambas películas, aunque tengo que admitir que recompenso en las pelis lo que no me atrevo a hacer en la vida real". Según el actor tanto Puig Antich como Jan "luchan contra la injusticia y quieren cambiar el sistema", aunque el anarquista catalán tenía "un enemigo claro, la dictadura de Franco, contra quien luchar".

La película se centra en el personaje de Salvador y no profundiza mucho en el grupo MIL y sus ideales, lo cual le ha acarreado críticas por parte de antiguos militantes del MIL, compañeros de Salvador, que afirman que se ha vaciado de contenido político al personaje, y se ha dignificado falsamente la imagen del carcelero, el juez militar y la Brigada Político-Social de la policia franquista.

En cualquier caso y al margen de estas críticas, me parece una película de gran calidad, que cuenta la historia de Salvador Puig Antich con toda la crudeza que exige, pero a la vez con ternura, mostrando una familia unida que lucha por no desmoronarse, porque "mientras hay vida hay esperanza".